Con el permiso de Sudamérica, a excepción de los argentinos...cuando no.

Ayer me levante después de soñar que Perú había logrado meterse entre los 8 primeros equipos del mundial de fútbol. Lo que antes podía decirse que era un signo de locura, hoy es parte de la realidad peruana. Perú, con su equipo sub-17, ha logrado la hazaña (ninguna selección, ni en mayores, lo logró) de quedar entre los 8 mejores equipos del mundial de fútbol de su categoría. Claro que ahora tengo gran parte del brazo izquierdo morado, porque tuve que pellizcarme muchas veces para convencerme de que no seguía durmiendo.
Hazaña también es para mí el hecho de no poder tener información globalizada, aquí donde me encuentro, de este mundial que se juega en Corea del Sur. Y es que a ningún canal uruguayo le interesa transmitir el mundial porque su selección ni siquiera clasificó. Y no es por sacar pica, cachita o burlarme de los celestes con su garra charrúa. Pero supongo que, en todo el mundo como en Perú, los mundiales se transmiten se clasifique o no el país que transmite. Digo así sea a las 3 de la madrugada yo contento. Finalmente somos (o éramos) 4 equipos que representamos a nuestros hermanos sudamericanos: Perú, Colombia, Brasil y Argentina. ¿El orden?, bueno, para evitar favoritismos escogí ordenarlos de manera descendente y alfabéticamente invertidos. Se suele hacer así.
Como a grandes problemas grandes soluciones, y visto que FOX sólo pasa los partidos de los argentinos ¡Que raro!, busque la solución en Internet. Algunos portales dan los informes de los partidos minuto a minuto. Pero no es lo mismo que ver la señal de TV o al menos escucharlo en tu radio a baterías. Hasta que por fin llegó. Encontramos en internet Radio Tacna: La Heroica. Y claro pasa el partido completo. A gozar ahora sí.
...Irvin Ávila anota y Perú clasifica a los cuartos de final y deja de lado a Tayikistán (vecinos de 'Aquinoestán', 'Masallaestán' y 'Dondeestán'). Mientras que en la misma hora Brasil iba siendo eliminada por Ghana. Argentina si paso, le tocó fácil con Costa Rica ¡Que raro! y el buen Colombia quedo fuera también ante Nigeria. Ahora sólo quedamos dos y con el permiso de nuestros hermanos sudamericanos:

A Ghana se le gana. Dale Perú a vengas a nuestros hermanos brasileños.

No es que me considere un periodista que sufra de subjetivo o se vanaglorie por su objetividad pero en una fecha como esta la objetividad la llevo debajo de la blanquiroja. ¡¡¡Dale Perú!!!

El Cuñado de Roverano

Otra de las cosas curiosas que dejó, para mí y mi grupo de amigos peruanos, la noche de la nostalgia fue un encuentro inesperado. Pero todo comenzó con un despliegue policial del cual me debo encargar de describir previamente. Empecemos.

Teníamos planeado salir a algún boliche durante la noche de la nostalgia para experimentar toda aquella algarabía que siente en esta fecha la mayoría de uruguayos. Si algarabía en la noche de la nostalgia aunque los términos puedan sonar un poco contradictorios. Pero ese no es el tema de este blog. Sino que para poder salir a divertirnos primero habría que reunirnos. Lo hicimos. Dicen que reunión sin alcohol, velorio. No estoy de acuerdo porque para mì mas bien en los velorios es cuando más se ingiere licor y se conocen a chicas más predispuestas. En todo caso, comenzamos a tomar algunos tragos en casa. Una vez sazonados como pavo en navidad partimos.

En el camino recordé una noticia que leí en la mañana acerca de un gran operativo policial sin precedentes. Esta noche donde todos toman sin parar había sido elegida por la policía nacional para erradicar algunos malos hábitos. Algunos como "Manejar en estado etílico". Frases como "si maneja no tome", o "evite accidentes que tome su mujer" quedaron de lado. Aquí la fuerza bruta o el castigo sin contemplaciones debía intervenir. Que más expertos en cualquier lugar para esto que los polícias y para hacerlo efectivo la fuerza policial montevideana decidió desplegar el importante número de: 30 oficiales.

Bueno con la cantidad de policías que vi desde que llegué al país supongo que es la mitad de los que existen. No me animo a confirmarlo. Por mi seguridad espero sean más. Y si lo son es admirable lo madura que es esta sociedad urguaya. Bueno, como dije anteriormente, emprendimos nuestro camino en dos autos y con algunos litros de "cuba libre" encima. Como uno de los autos fue taxi se supone que el conducto restaba sobrio. En el que iba yo el conductor con las justas estaba.

El operativo ya había comenzado y el brazo largo de la ley logró alcanzarnos. Pero hay que decir lo que el señor te da de más, te lo quita de algún lado. Y eso sucedió con la ley porque les dio brazos largos pero en olfato o percepción de nivel de alcoholimia quedaron cortos. El oficial que nos atendió debería decir que encima se preocupo por el sismo ocurrido hace poco en terriorio peruano. (Una línea de silencio__________________________________________________________).

Luego como buen uruguayo conversador nos relató que el tenía un cuñado en Perú. En la República de Arequipa. Y que por la televisión se enteró de que estaba bien. Claro era nada más y nada menos que Gustavo Roverano. Arquero reconocido en fútbol inca. Al emocionarnos se olvido del objetivo del operativo. El olvido fue tal que hasta premio nos dieron. Gaseosa que utilizamos en el ron de más tarde y mentitas como para pasar el operativo de regreso oliendo a menta. ¡Grande Roverano! o debería decir ¡Grandes Roveranos!

La Noche de la Nostalgia

A partir de hoy me declaro un tipo anti-nostálgico y eso no tiene nada que ver con anti-analgésico porque en realidad necesito unos cuantos ahora. Es que anoche fue la "Noche de la Nostalgia" en Montevideo. UNa fiesta en particular cada 24 de agosto donde las personas de todad edad y clase social salen a dar rienda sueltas a sus más bajos institntos nostálgicos por los boliches de la ciudad.

Estas es la fecha donde más gente sale en el año a festejar. Salen adolescentes como veteranos. Aquí es donde nace una primera pregunta. ¿Cuál es la fecha en especial por la que se ponen nostálgicos? Es que dependiendo del rango de edad el universo 'nostalgitivo' es muy amplio. No es lo mismo la nostalgia de un chico de 20 años que la nostalgia de un tipo de 60. Como que en ese caso, este sentimiento, se desfasa por algunas generaciones. Imaginen a un veterano de 60 años poniendose nostálgico con canciones de Vilma Palma e Vampiros o a un chico de 15 años escuchando los Iracundos.

Salimos de parranda, de farra, de juerga como sea que le hayan llamado antes. La ciudad vieja, el centro bailable de Montevideo, estuvo repleta de gente. Algunos 'African's Look' resaltaban notoriamente. Entramos en uno de los boliches después de formar la siempre tan detestable cola. No se hasta ahora si se forma para darte la sensación de impotencia o sólo para que se divierta la persona que atiende al verte sufrir.

Al ingresar había de todo: Música disco, raggae, pachanga, rock antiguo, una que otra cumbia y salsa pasada, e incluso trans. No se donde estaba la nostalgia en ese momento. Como tampoco se dónde estaba la nostalgia cuando una pareja de muy excitados jovencitos casi me caen encima al besarse desaforadamente. Al final de la noche, o debería decir el principio del día, la euforia reemplazó a la nostalgia. Invadió al DJ y colocó toda música de moda como para que los chicos y chicas que quedaban volviesen a salir el año que viene en esta fecha tan comercialmente nostálgica.

"Cyber's Vs. Consolas"

Cuando la tarde de ayer pasé por un cybercafé vi a unos chicos que jugaban play station 2. Hay que indicar numerito y todo para que no se diga que uno está desfasado. Por cierto no se por qué motivo, razón o circunstancia (como diría Don Ramón) llevan ese nombre. De los 200 "cyber's", a los que habré ido en todo mi recorrido latinoamericano nunca, salvo en uno, me sirvieron café. Dicho lugar se llama "Silver" y por su osadía de servir café en un cybercafé hay que mencionarlo con nombre propio. ¡Felicitaciones!

Pero por otro lado se supone que un cybercafé en un lugar de encuentros cibernéticos. Así que no se por donde entra el motivo para introducir juegos de videos dentro de los cyber's. Acepto incluso los juegos en red porque se juegan desde la misma PC. Pero una consola de video implica colocar un televisor adicional. En todo caso porque alguien no inventó los 'consolacafé', los 'Wiicafé' o en todo caso los 'playcafé' (sólo para jugadoras). No, nadie se dio ese trabajo así que sólo ocuparon un poco de espacio ajeno.

Pero al ver a estos niños, prepúberes y adolescentes entretenerse de tal manera, excitarse con cada movimiento y proliferar palabrotas irreproducibles (que genio para inventar nuevos insultos), no puedo dejar de añorar aquella época en la que yo era parte de los video juegos.

Parece que fue ayer. Bueno, en realidad fue ayer, en la noche. Anoche. Y es que casi todas las noches invadimos el sacrosanto hogar de una pareja de amigos ya casados, después de dos décadas y media de haber nacido, con el mismo objetivo con el que nuestros antepasados vistaban a sus amigos para libar licor. Entretener al marido y fastidiar a la esposa.

Y déjenme decirles que no me da vergüenza. Pues después de haber leído que el número 2 del tenis mundial, Rafael Nadal, se escapa de las concentraciones para jugar Pro Evolution Soccer con sus 'top ten amigos' no me averguenzo. Después de saber que el es muy poco profesional y perdería mucho en una amanecida fortuita (te amaneces jugando sin darte cuenta) caigo en la idea de que tengo mucho menos que perder.

En todo caso la discusiones por el gol anulado, la falta de obediencia del control (como si tuviese vida propia), los sonidos onomatopéyicos que se emiten, algunos olores que se escapan y nuevamente variedades de insultos, cambios de sexo a los jugadores, discriminación de todo tipo con ellos, nos hacen caer que somos más felices siendo humanos. ¿Cómo llegué a esa conclusión? No se las diré porque esta sera mi excusa para seguir jugando.

El chiste de las nacionalidades

Estuvimos sentados en un restaurante uruguayo seis personas de distintos países. Un colombiano, una chilena, un cubano, un uruguayo, una argentina y yo (peruano). Parecía que el mundo estaba listo para contar un chiste con nosotros. Ya saben eso de que hacen tipos de varias nacionalidades en un mismo lugar. Salíamos de un taller con el estómago a digerir todo lo que viniese en el camino. Ese día comimos hasta piedras, literalmente, porque al cubano le tocó encontrarse una en su comida. Debió de ser el arroz y debió ser de casualidad (a quien no le ha pasado) porque los restaurantes uruguayos son geniales.

Para esto que a pesar de ser geniales tienen ciertas diferencias. Y empezemos. En primer lugar hay que dejar algo muy en claro. La comida uruguaya es excelente. Deliciosa, sus carnes son un regalo de Dios. Pero hay que indicar que el servicio a veces deja mucho que desear y juega en contra de buena fama que ya tienen ganada. Lo digo porque para empezar vinieron tres chicas distintas a repetirnos el menú del día. Cada una de ellas iban a su vez agregando nuevos platos a la lista. Lo cual hacía que fuésemos cambiando nuestros elecciones gastronómicas. Al suceder esto nuestros jugos gástricos nos jugaban malas pasadas. Al momento de hacer el pedido final las tres chicas anteriores brillaban por su ausencia. Aquí debo indicar que contábamos sólo con un hora para almorzar.

En nuestras mentes, excepto la del uruguayo que preguntaba por nuestras especialidades culinarias, se evocaba sabores que a veces no se encuentran como en casa. Dicho sea de paso por mi parte añoraba el cebiche o el seco de chabelo como buen norteño de la costa peruana. En todo caso la conversación se hizo bastante policultural. Incluso dificultosa, pues con los diferentes dialectos y jergas que teníamos todos, nos entendíamos con explicaciones de por medio.

Una vez hecho el pedido fueron llegando los platos a nuestras mesas. No es que cada uno se siente en su mesa sino que procedimos a realizar el respectivo operativo 'juntamesas' porque éramos muchos.

Entre los chivitos, el petit entrecot, la milanesa, la picada y un plato parecido al arroz chaufa peruano sólo que en vez de arroz lleva tallarines (no recuerdo su nombre), saciamos nuestra hambre. Uno de los placeres del ser humano. Pero como todo placer tiene su fin. Y este fue corto de lo que esperábamos debimos volver al curso que nos apremiaba. Para variar nadie viene a ofrecer la cuenta. Por los restaurantes, que sigamos comiendo hasta reventar. El hecho es que cuando la pedimos demoraron un buen rato en traerla. En una de esas y nos animábamos a pedir algo más. Supongo que por eso. Por dentro pensaba menos mal que pagamos en efectivo y no con tarjeta de crédito. Experiencias pasadas me indicaban que eso si se vuelve una revolución. Al fin con la propina respectiva sobre la mesa logramos salir de ahí, con una media hora de retraso pero salimos. Directos a un lugar que será motivo de otro blog. Ya se imaginan donde.

Viaje en Ómnibus

Hoy me subí a un ómnibus aquí en Montevideo con destino fijo. Pensaba en lo parecido que podía ser el transporte público en Perú y Uruguay. Siempre vamos a encontrar gente cómodamente sentada. Otros osados varones, en su plenitud física, ocupando los asientos de las damas gestantes o liciados. Claro hasta que se vaya llenando el ómnibus. Pues si llega una futura madre o algún discapacitado se levantan y luego estos 'pícaros personajes' se quedan sin asiento. Es que estos asientos siempre son de los primeros, el ómnibus se llena y deben pasar atrás donde los asientos libre quedan ocupados.
Dale, suben, bajan, dirían en el Perú. Acá es un poco más ordenado. Subes por la puerta delantera. El chofer o algún caso un mudo cobrador te intercambia el pasaje por tu dinero. Digo mudo porque apenas hablan, es eso o malhumorado. ¿Han pensado alguna vez que distinto sería si te atendiera una chica en minifalda o algún joven físicoculturista? Pues nadie dudaría en pagar el aumento continuo del pasaje.
En fin luego de cancelar tu deuda con la movilidad debes soportar algún golpe de la persona parada al lado porque no alcanzó asiento. ¿Cuándo tendremos buses más grandes?, no lo sé. En todo caso esta persona, producto de la ley de la inercia, se avalanza sobre ti y debes tener suerte si no va comiendo algún dulce o helado. Ya que dicho manjar quedaría impregnado en tu atuendo. Deberían prohibir comer parado en los ómnibuses o en todo caso colocar un snack dentro. Así podríamos improvisar alguna guerra de comidas entre ejecutivos y personas mal vestidas (bueno más casuales o deportivas.
Pasado un tramo de nuestra ruta se sube un individuo a vendernos chucherías. El de hoy fue bastante interesante. Tenía la apariencia de Carlos Thorton, actor peruano que goza de cierta fama. Deseado por las mujeres peruanas y celado por sus varones. Comenzó su clásico discurso mientras vendía unos estuches para controles remotos qe venían en tres tamaños y colores. Mientras él vendía, yo, iba pesando en cuanto dinero ganaría este muchacho como modelo en Perú. Digo a las peruanas les 'aloca' (sólo un estereotipo) la piel blanca y los ojos claros.
Pero me pregunté también si es que sucede al contrario con nuestra raza en estas tierras orientales. No lo sé muy bien, pero por las dudas me inscribí ya en una escuela de modelos a ver si gano unos pesos extras. Mientras tanto, hasta que llegue a triunfar en las pasarelas de Punta del Este, me seguiré movilizando en el tan común ómnibus.

Un viaje con destino incierto

Hoy hice un recorrido por una gran cantidad de cementerios montevideanos. En pocas palabras regresé a casa oliendo a muerto. Literalmente. Porque después de un cierto tiempo, casi todo el día, de caminar bajo un sol (en buena hora salió) inclemente. Mis fluídos corporales no tenían nada que envidiarle a los de los muertos.
Lo que más me sorprendió de mi 'necrotour' fue el valor que se le da a nuestros seres queridos una vez que murieron. En Perú al muerto se le respeta. Bueno al cuerpo en realidad porque después de que se muere el difunto (en realidad se vuelve difunto al morir) vienen las viejas disputas de la herencia. Y digo antiguas por que desde antaño con cada muerto una disputa por másleve que sea. Aclaro, cada niño que nace, lo hace con un pan bajo el brazo. Cade muerto que cae, lo hace con una herencia bajo el cajón.
Hoy descubrí que en Montevideo la mayoría de los muertos (o al menos de los muertos misios) tienen que pagar alquiler. Este alquiler, por cierto, dura unos cuantos años solamente. El promedio de expectoración de su nicho es de 3 años. Después de eso lo sacan sin maletas a la calle.
Aquí es donde conocí un término muy interesante. La reducción. Y es que no contentos con reducirnos siempre en vida (me refiero al sistema) nos quieren reducir también de muertos. Al cuerpo ya en proceso de putrefacción lo sacan nuevamente a la luz del sol. Lo acomodan como sea dentro de una urna. Agregan el fémur de algún vecino cercano para que vaya acompañado. Y de nuevo queda listo para ser visitado.

Pero ahí no termina la travesía. El viaje hacia el más allá tiene una escala adicional. Porque luego de tres años más de viaje ininterrumpido, se interrumpe. Te sacan de la urna y te trasladan al horno. En el crematorio se encuentran tus familiares esperando unas cenizas que no se saben si son del difunto o del lechón que se asó días atrás. Al final del proceso se entregan las cenizas en una bolsita. Como si fueses a comprar medio kilo de pan rallado en la tienda.

Luego los familiares deciden si te hechan en el mar, en un lago, te ponen como adorno en la casa o te fuman (al mismo estilo de Charly García).

Después de esto, sabiendo que aún hay más descripciones de formas de entierros, prefiero que me cremen directamente y mis cenizas las hechen al viento. Eso sí luego no me hechen la culpa de la contaminación ambiental.

De tal Astilla, tal Palo

Bueno esta vez me puse un poco nostálgico al descubrir que mi honorable padre, mi viejo, mi progenitor o como alguna vez el me señaló: "el que cargó conmigo más tiempo que mi madre en su vientre" (luego me explicaría muy coloquialmente en sus pelotas), había decido crear su propio Blog. Dicho sea de paso de muy buena calidad.
Recuerdo en mi infancia, cuando aún dependía del cuidado de mis padres y de su guía colgado de un mano perfumada con tabaco, haber descubierto que mi padre además de conductor radial (no conducía la móvil sino un programa de radio) era también un prospecto de escritor. Más tarde cuando mis dotes artísticas brotaron como por herencia, enterarme que mi padre utilizaba la computadora personal (no sé por qué le llamaban así si la usaba toda la familia) con fines más literarios.
Leía mientras él dormía sus escritos y me llenaba de orgullo haber heredado este don de mi entrañable padre. Muy conocido tenía que mi viejo había sido un buen Disk Jockey (como se le llamaba en esas épocas de de long play y cassettes). Poco enterado mas bien estaba de que mi 'viejo' sabía escribir muy bien. Y el mundo no lo conocía tampoco.
Hoy gracias a la tecnología y el internet, mi padre (como otras tantas personas tenemos) tiene la oportunidad de ser leído por mucha gente. Descubrió hace poco los bloggers y ya tiene su página ahora. Se las recomiendo es muy buena (http://www.olaliteraria.blogspot.com/). En todo caso habría que decir que lo que se hereda no se hurta.

Calentamiento Cerebral Global

En la hora del amuerzo después de habernos alimentarnos cmo Dios manda, siempre es bueno o es constumbre hacer una sobremesa. Dicho sea de paso, no sé si para que digeramos nuestros alimentos o para saciar también nuestra hambre de chismes y noticias. En todo caso la mencionada sobremesa de hoy fue bastante satisfactoria, llegando al final a la siguiente premisa: "¿cómo saben los extraterrestres de las películas que nuestro planeta se llama Tierra?" Pues, sino hablan nuestro idioma (supuestamente) ¿cómo saben que lo llamamos así? Todo este tema nació de una discusión del calentamiento global. Pasó a explicar como derivamos de una conversación a esa inquietud mas bien cinematográfica.
Mientras tomábamos un delicioso aguadito (sopa con arroz) planteábamos el tema del frío que se sentía en Montevideo. Que el clima que había en Perú llegaba, en la costa norte hasta 16 y en Cuzco (sierra sur) hasta 8 grados centígrados, como temperatura mínima. Que las temperaturas de la tierra cada vez son más frías. Que el próximo verano de seguro será más caluroso y que todo esto se debería al calentamiento global. Aquí empezó todo.
Nos dividimos enseguida en dos grupos: los ecologistas que defienden el mundo de la emisión de gases tóxicos como el anhídrido carbónico y los que defendían las políticas más consumistas que opinan que el mundo no se va a destruir. No sé si llegamos al nivel Kyoto pero fue una versión micro de un problema mundial. Y a decir verdad nos tomamos mucho a la broma (como suele hacerse a nivel macro) los problemas del mundo actual.
Empezamos a discutir que estos temas de climas extremos suceden cada cierta cantidad de decenas de años. Que nunca habían llegado a picos muy altos. Y que cómo hacen para vivir gente en climas muchos más extremos de los que normalmente se conoce. Por ejemplo: los esquimales en el polo norte o aquellos que viven en el desierto de Irak.
Expusimos todo y no llegábamos a ningún acuerdo (en serio parecíamos Kyoto). Que la tierra se autoregula con sus fenómenos naturales. Que somos muy egoístas al pensar sólo en los que vivimos en luegares con temperaturas ideales. Que nosotros infuímos al empeoramiento de los fenómenos o que no lo hacemos. Que la idea es que la gente no tenga que mudarse de lugar cuando se acabe el agua, aumente la cantidad de insectos o su casa se vea inundada unos centímetros bajo el agua.
Al final como en la vida real, postergamos el tema para discutir quien tenía razón para dentro de unos 50 años. Cuando descubramos (si es que estamos) quien tenía razón, será tarde para cambiar de parecer. Quizá nuestra descendencia sean los que tengas las cosas más claras para bien o para mal. El tema está en: ¿nos arriegamos o no?
Alguno nos invitó a meditar sobre los americanos. Con la tecnología que tienen deen ya saber que puede pasar. Que también con la misma tecnología cometen injusticias mundiales y no les importa. Que si le pasa algo al mundo les pasa ellos también. Pero si ya esán tratado de crear un clima ideal en Marte, es posible que estén pensando en mudarse. Que los chinos disparan yoduro de plata a las nubes para hacer llover. Que todo lo que sube tiene que caer y sobre quién caen los restos de yoduro de plata. Que si lo indios no tendrían cohetes con el mismo químico. Que si las nubes les pertenecen a todos o no. Que quién y cómo regularemos el tema cuando logremos maejar nuestra atmósfera.
Pesamos también en com sería viajar a Marte. "Muy frió dijo alguna, me gusta más el calor". Entonces lo friolentos a Venus y los calenturientos a Marte. Que porque a Plutón lo bajaron de categoría de planeta si de pequeño fue el que más me costó aprender por ser el último. Que existen en análisis dos nuevos planetas. Que para poder llamarlos de esa manera deberán pasar por un proceso como el de canonización, muy largo y burocrático (Salvo que tenga padrino).
A partir de ahí dejamos las drogras de la sobremesa y nos dimos cuenta que nosotros llamamos a los planetas de una forma y en las películas de ciencia ficción los extraterrestres que llegan a nuestro planeta lo conocen por el mismo nombre. Acaso ¿hay un cartelito encima de cada planeta: "Welcome to the Earth" como en los Looney Tunes? Que curioso nunca se nos ocurrió eso con nuestro intelecto promedio. Se imaginarán que tonterías mayores se les ocurrirá a los intelectos de Kyoto. Tonterías mayores de seguro. Ahora entiendo porque no se ponen de acuerdo nunca.